jueves, 1 de mayo de 2008

Parrillada vaciada



El calendario nos trastoca a todos y los programadores de televisión no se escapan de festividades y puenteces varias, pero se olvidan de los sufridos inmóviles que permanecen ante la rutina catódica. Aunque la realidad es diferente y ante los ojos aparece una pantalla bajo mínimos, de rellenos y refritos imposibles. Por no hablar de esas películas rescatadas del baúl de las sandeces pseudo-cinematográficas. Todo en un auténtico despropósito para el televisor que no tiene más remedio que cultivarse de otra forma más útil que ante la cutrería de retransmisión en falso directo.
En estos días puentiles nos esperan repeticiones de cazatalentos en humillación constante, de ilusiones en caja tonta, de noticias de las desnoticias, de surrealismos cubre huecos programáticos, de revisiones de lo peor y más grueso, de chismorreos de cuarta y de retransmisiones de la vacación ajena ante el tiempo dictatorial. Unos emplayados, otros encajonados.
Todo sea por acercarse a la miseria que alberga este medio televisivo que decae en su propio fondo. Alguien en heroicidad tendrá que bajar a rescatarlo con sus infecciones y dolencias cuasi crónicas. Enfermedades sin cura y al aire en estas jornadas de la nada, del limbo de bienvenida mayera.
¿Pero quedarán trabajadores en las cadenas? Si les hay, feliz día por serlo. A ti, también. Pero hagas lo que hagas ponte TDT.

1 comentario:

Manu dijo...

Si es que la tele en el puente... menos mal que llega final de mayo!! ;-)